jueves, 28 de enero de 2010

Instrucciones para darle cuerda a mi locura

Con frecuencia me acuerdo del cuento de Cortazar sobre los relojes, desde la primera vez que lo leí me impresiono por que lo consideré como una verdad absoluta.

Tanto usted como yo podemos pensar que al esfumarse los relojes de la vida uno se quitaría de encima el problema que menciona Cortazar. Se supone que ahora que no tengo uno solo debería ser libre sin embargo me despierto en las noches pensando cuanto tiempo más puedo dormi, o me pregunto mientras camino cuantos minutos me quedan para llegar al punto Y o hace cuanto tiempo que estoy haciendo lo mismo.

Hoy me doy cuenta tristemente que ya no soy esclava de un reloj pero si de mis preguntas sin respuestas.

1 comentario:

Pinkrobot dijo...

Me gusta tu post spree. Son buenas cosas pero ando seca de comments, la ofis life is takin it's toll :(

pero keep it up