martes, 24 de mayo de 2011

Sobre buscar trabajo...

Uno de los misterios más grandes del universo es cómo funciona la mente de aquel que trabaja para un departamento de recursos humanos. A continuación no les ofrezco una opinión informada al respecto, sólo las cuestiones que me intrigan después de semana y media de buscar trabajo.

No señores de recursos humanos, no se dónde voy a estar en 5 años. No tengo una bola de cristal, no se leer el café ni las hojas de té. No son los primeros en preguntármelo, mi preparatoria me hacía redactar planes de vida cada 5 minutos y mi universidad por lo menos me obligo a hacerlo 3 veces, y les voy a decir a ustedes lo mismo que a ellos: no se en donde voy a estar en 5 años.

"Con un poco de suerte este hombre va a estar en mi cama y voy a vivir en una isla griega,
con un poco de mala suerte voy a estar trabajando para usted"


¿Saben qué otra de sus increíbles herramientas no sirve para nada? Pedirme que me describa en 40 palabras. ¿Cómo planean que me resuma en tan poco? Y aquí no estoy insinuando que yo sea particularmente especial, pero vamos... 40 palabras no definen ni al ser humano más sencillo.

Lo que usted quiere que le diga es que soy una mujer proactiva, emprendedora, con capacidad para trabajar en equipo, metas bien definidas y cualquier otro término sin un significado conciso que esté de moda. Y saben qué es lo que no va a conseguir de esto, una verdadera descripción sobre mi. Con esto no se van a enterar de muchas cosas sobre mi que son muy ciertas pero que desgraciadamente se ven mal en una solicitud de empleo.

Entre sus miles de preguntas repetitivas me he topado ya más de una vez con la oportunidad de dar mi opinión sobre su compañía. Pues qué creen señores de recursos humanos... no les voy a decir la verdad. No se si su compañía sea o no un buen lugar para trabajar, no se si su compañía sea socialmente responsable o no... Estoy aplicando por que creo que usted esta dispuesto a pagarme y tiene un departamento donde yo puedo desarrollarme, no es más que una transacción... su dinero por mis servicios. Si a final de cuentas terminamos teniendo una mejor relación pues que bueno, pero por el momento me conformo con que me de dinero y sobre todo experiencia.

En cosas un poco más generales, no entiendo ciertos requisitos de sus ofertas... ¿para qué limitarse a los egresados de determinada escuela? ¿Por qué sólo un hombre puede hacer su importante trabajo de auxiliar de departamento de marketing? ¿Por qué sólo una mujer puede hacerlo? ¿Cómo pueden esperar que su candidato tenga entre 23 y 25 años con 5 años de experiencia en el campo? ¿Para qué hacer su oferta confidencial? ¿Qué no tengo derecho a saber para que estoy aplicando?

La verdad mi apreciado señores del departamento de recursos humanos es que yo no los comprendo y aunque creo estar sorteando este problema de la mejor manera que se me ha dado a entender, espero dejar de tratar con ustedes lo más pronto posible.

sábado, 21 de mayo de 2011

Que cosas tan raras

Hace unos días soñé que un hombre con una voz nasal me narraba mi vida. Estábamos solos en su oficina y me leía en todos los aspectos de la palabra. Leía mi historia escrita por alguien en un archivo amarillo y me leía a mi sentada en una silla metálica.

Me recordó mis sueños, mis frustraciones, mis logros, las oportunidades que tome y las que no, también hablamos de la primera vez que comí un helado y sobre ese día que no quiero ni me interesa recordar.

Me doy cuenta que use la palabra "hablamos", pero esto es mentira por que yo no dije absolutamente nada. Fue su monologo sobre mí y yo no tuve algo que aportarle.

Pero no me mal interpreten, por favor no lo hagan, no dije nada no por que el asunto me pareciera tedioso sino todo lo contrario. Simplemente no quería romper el hilo de la historia, que si bien para él era una más para mi lo era todo.

"Justo ahora usted esta sentada en mi oficina, escuchando con interés mis palabras y pensando cuál será mi opinión sobre su vida." Cerró el folder , espero unos segundos como si buscará una reacción en particular de mi parte y finalmente señaló la puerta. No recuerdo nada más, pero estoy segura que lo veré un día de estos y me dirá que ha pasado desde entonces.



jueves, 5 de mayo de 2011

Pensamiento aleatorios sobre la batalla de Puebla

  • Fue la segunda fecha importante que me aprendí. (5 de mayo de 1862)

  • Mi personaje histórico favorito es Ignacio Zaragoza, fue todo el asunto de "Las armas nacionales se han cubierto de gloria"... siempre me pareció bastante poético. Siempre me he preguntado cuanto tiempo le tomo pensarlo... no se ve como algo que se le ocurriría a uno mientras mata a un francés...

  • Mi billete favorito era el de 500 hasta que pusieron a Frida Kahlo, ahora es el de 100... you rock Nezahualcóyotl!


  • Esta carta se la escribió Victor Hugo a los poblanos, me gusta la parte del proyectil de libertad... suena bien hardcore.
Habitantes de Puebla, tenéis razón en creerme con vosotros. No os hace la guerra Francia; es el imperio. Estoy con vosotros. Vosotros y yo combatimos contra el imperio; vosotros en vuestra patria, yo en el destierro.

Luchad, combatid, sed terribles y, si creéis que mi nombre os puede servir de algo, aprovechadle. Apuntad a ese hombre a la cabeza con el proyectil de la libertad.

Valientes hombres de México, resistid. La república está con vosotros y hace ondear sobre vuestras cabezas la bandera de Francia con su arcoíris y la bandera de América con sus estrellas. Esperad. Vuestra heroica resistencia se apoya en el derecho y tiene en su favor la certidumbre de la justicia.

El atentado contra la República Mexicana continúa, el atentado contra la República francesa. Una emboscada completa la otra. El imperio fracasará en esa tentativa infame, así lo creo y vosotros venceréis. Pero ya venzáis o ya seáis vencidos, la Francia continuará siendo vuestra hermana, hermana de vuestra gloria y de vuestro infortunio; y yo ya que apeláis a mi nombre, os repito que estoy con vosotros; si sois vencedores os ofrezco mi fraternidad de ciudadano, si sois vencidos mi fraternidad de proscrito.



domingo, 1 de mayo de 2011

El mundo perdido

Siempre he querido saber a dónde van las cosas perdidas y aquí no me refiero a tu sentido de la moral que no ves desde la secundaria o tu virginidad o tu buen gusto. Hablo de manera muy literal sobre las millones de plumas que he perdido, aquella chaqueta que olvide en la kermes de la primaria y al burro de plástico que tire camino al kinder cuando tenía 4 años.

A veces me sorprendo pensando en sus inanimadas vidas y esperando que hayan encontrado un buen hogar con alguien mucho más comprensible que yo y quien sin duda les brindaría un mejor cuidado. Pero en otras ocasiones me siento mal por que se que probablemente no fue así. En otras me siento tonta por que ni Toy Story ni el pequeño tostador valiente son reales y las cosas no tienen sentimientos ni sueños de reencuentro con sus pasados dueños.

Entonces así es mi querido lector, efectivamente, a veces paso mis tardes pensando que la infinidad de transportadores que perdí en la secundaria viven en una granja para artefactos geométricos al norte del estado, trazando ángulos hasta encontrar la felicidad. Y déjeme decirle que usted no se encuentra en posición de juzgarme ¿Por qué? Pues por qué se lo prohíbo.